La fragancia precursora de la perfumería americana Youth Dew de Estée Lauder es un "Eau de Parfum" para mujeres perteneciente a la familia oriental especiada. Es una de las fragancias con mayor proyección e intensidad en el mercado. Con más de medio siglo a sus espaldas, este perfume sigue atrayendo a un fiel séquito de mujeres que se declaran enamoradas del rocío juvenil. La fragancia está inspirada en la mujer americana, sensual, envolvente y extremadamente cálida. Esta fragancia fue lanzada en 1953 por la perfumista Josephine Catapano. En ella, fusionó hermosas flores con potentes maderas y especias, y creó este elixir de sensualidad. Un aroma inconfundible, con un carácter fuerte y una personalidad muy marcada. Fue creada para una mujer enérgica y activa, con un ritmo de vida frenético, que no podía perder un minuto de su día para retocar su fragancia, es decir, necesitaba un perfume duradero, de sol a sol, así nació Dew Youth, para satisfacer el deseo de este sector femenino. Su pirámide olfativa es una de las más complejas de la casa Estée Lauder, compuesta principalmente por tres elementos: un sinfín de flores intensas y potentes, altamente aromáticas y persistentes; especias combinadas a la perfección, aportando misterio y responsables de proporcionar una fijación intensa en la piel; y maderas exclusivas, elementos sensuales y de alto poder de seducción, que desempeñan un papel final muy importante. Femenina clásica. Gracias a sus más de 50 años en el mercado, esta fragancia se ha convertido en un clásico de la perfumería actual. Amor u odio. El rocío de la juventud es uno de esos perfumes que amas u odias debido a la intensidad de sus notas. Quien lo adora, cuida un tesoro, y se convierte en una adicción insuperable, pudiendo sentirse desnuda si le falta su fragancia. Público maduro. Esa fragancia está dedicada a un público más maduro, debido a su intensidad. Mujeres equilibradas y enfocadas, en busca de un sello de identidad personal e intransferible.